En esta novela se mezcla lo mejor de la novela histórica con el suspense de las mayores sagas de intriga.

En el Real Alcázar de Madrid en enero de 1568 el príncipe don Carlos, que es el heredero de un imperio en el que nunca se ponía el sol es detenido por su propio padre. Las circunstancias apuntan hacia el como sospechoso y se le va a acusar de crímenes terribles. Como gran parte de la corte piensa que Don Carlos está completamente loco, la situación amenaza con hacer temblar los propios cimientos de España.

Paralelamente, y no demasiado lejos de allí, un niño de sólo siete años tiene que enfrentarse a la aventura de una vida nueva con un nombre nuevo.