En ocasión del cumpleaños del director Germán Lander, llega intempestivamente su vieja amiga Eleonora, experta en Artes Mágicas de Antiguas Civilizaciones, en compañía de un niño africano y una niña china, de asombrosas capacidades mágicas.  Lo que todos ignoran, es que detrás de la inocente apariencia de Makimba y Zubiri, se ocultan, un terrorífico guerrero africano y una temible guerrera china adulta, que reciben órdenes telepáticas de Eleonora, actuando al servicio de Ostevúm, un antiguo tótem de las selvas africanas, un espíritu del mal que le otorga a sus seguidores el poder de la telepatía.  Elenora ordena a sus dos súbditos, llevar a Salvador y a Christian al tenebroso Valle de Ostevún, sentenciando que “deben morir, al igual que Lander”.